Lo primero que se echa del verbo echar, es la h.

Lo primero que se echa del verbo echar, es la h. Puedes echar de menos, y incluso, en ocasiones puedes echar de más. Yo a ti, te echo de menos. Primero, te echo de menos en forma física, necesito tus abrazos , necesito tus besos y de tus tonterias, aquellas que me hacían todo un poco más fácil, te necesito aquí presente, aunque no digas nada, necesito aquellos silencios incómodos con los que hacias que se me acabaran las uñas de tanto mordérmelas. Te necesito aquí para poder darte mis broncas monumentales, para enfadarnos y no hablarnos, pero al final acabar pidiéndonos perdón y esperar como caníbales para vernos de nuevo. Después te echo de menos en forma moral. Necesito tus 'te quiero' y tus dulces palabras, también las amargas que demuestran que estoy viva. Necesito tu cabezonería y tus cosas de niño pequeño. Necesito tus sonrisas y tus lágrimas... Y por último, te echo de menos en forma.. en forma ninguna, te echo de menos porque sí, porque te quiero aquí y ahora. Y no podría darte ningún otro motivo, sólo te podría decir que te necesito y no hay más.